domingo, 10 de diciembre de 2017

¿Cómo me hago más listo? (2ª parte)

El Neurofeedback y la mejora de las capacidades personales


Mucha gente piensa que la inteligencia es un rasgo fijo e invariable de cada persona… y es un error.
Nuestra inteligencia puede aumentar y disminuir, ya que depende de nuestras conexiones neuronales y estas cambian continuamente.


  Una definición simple, pero válida, de inteligencia sería nuestra capacidad de resolver problemas del medio, es decir, ser efectivos en la solución de los conflictos que nos plantea la vida.
Y seguro que todos hemos sentido que hay momentos de nuestra vida en los que hemos sido más efectivos, mientras que en otras ocasiones hemos sido más ineficientes.
No solo eso, casi todos notamos que cuando maduramos nos hacemos más eficientes. Términos como sabiduría hacen referencia a esa inteligencia incrementada con la experiencia, que técnicamente se denomina inteligencia cristalizada, como explicaba en mi artículo anterior.

 Pero resolver adecuadamente un problema no solo se usa lo que coloquialmente entendemos como velocidad mental, sino que también influye la atención que prestamos al problema, la efectividad de nuestra memoria a corto y medio plazo, nuestra capacidad de establecer asociaciones y muchos factores más.
Y sobre casi todos esos factores tenemos evidencias experimentales de la eficacia del Neurofeedback.
Aunque se suele considerar al Neurofeedback como un tratamiento para la eliminación de síntomas de diferentes trastornos, desde hace décadas se está usando también para la mejora de las capacidades cognitivas, profesionales, atléticas y artísticas.
En algún otro artículo os hablaré de alguno de los experimentos relacionados con el Neurofeedback, ya que son muy interesantes, pero hoy me voy a centrar en la inteligencia, que si no se me va el hilo.

 Es comúnmente aceptado el CI, Cociente Intelectual, como la medida de la inteligencia. Pues bien, se han hecho bastantes experimentos con Neurofeedback y CI.
Se pasa un test o batería de test para medir el CI en un grupo de personas, se les administra un tratamiento de Neurofeedback y después se vuelve a medir el CI, obteniéndose incrementos significativos.

 Así pues, gracias al Neurofeedback tenemos una forma fácil de hacernos más inteligentes.

 ¿A qué sería inteligente aprovecharla?



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